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Respira profundo

De cómo Laura es atendida en  Telcel

por la ejecutiva medio in love de su galán

Estamos en tensión pues a una semana de ser rescatada por el posible amor de su vida, de pronto se lo encuentra en Telcel.

 

¿Ahora qué? Estaba su galanazo, su héroe, a 5 metros. Miró a la izquierda tapándose la cara con un mechón mientras pensaba. Pensaba y lo escuchaba. La dulce voz que hace una semana la salvó, ofreciéndole llevarla a su casa el vergonzoso día verde, le explicaba a una viejita las ventajas de no sé qué plan. Tan bello, por su voz sonaba como si hablara como sonriendo, explicaba con tanta amabilidad, era precioso de oír.

 

La distraía su voz, realmente parecía de lejos como si la viejita se estuviera enamorando de su galán. "Mire, por otra parte, este tiene cobertura..." y bla bla, porque el mundo de los celulares se le hacía retorcidamente aburrido, pero el tono era como si explicara las razas de perros o los tipos de chocolate. Quería poder ser la viejita, estar en otro cuerpo y poder ver su boca moviéndose mientras explicaba las más hermosas diferencias.

 

—¿Cliente Número Treinta y Siete? —decía la ejecutiva del 6.

Ah, ahora razona, ese ruido de fondo, ese pitido que sonaba de nuevo era por ella.

 

Le hizo señas a la chava y se paró. ¿Por qué hizo eso?, ¿más o menos qué está haciendo?, ¿Epa, no traigo la chaqueta fea?, ¿Será que aún tengo puesto labial?, ¿Qué es lo que iba a hacer? Estaba ya casi en el puesto 6, faltaban dos pasos, tenía que decir qué quería, pero no podía dejar de mirar a su galán en el 7.

 

Porque los milagros existen, vio la boca de su héroe moviéndose e instantes después escuchó el contenido: "¿Me permite un momento, señora? Voy a imprimir la oferta". La viejita sonrió coqueta, o eso sitió Laura, mientras la espalda del galán se alejaba y cruzaba un portal que le devolvió la consciencia.

 

...

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Repito a ver si ahora sí, "le devolvió la consciencia":

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—¿...edo ayudar?

—¿Mande? - Balbuceó Laura.

—¿Que en qué la puedo ayudar, señorita?

Respira profundo.

—Ah, mire sabe qué, voy a tomar no más una foto acá de los planes y vuelvo, estoy indecisa, ¿sabe? Muchas gracias.

 

La vio abrir la boca, pero la cerró. Quizás le iba a decir que si gusta le explica los planes, pero le dio flojera. O quizás le iba a decir que se alejara del chavo del 7 que es suyo pero decidió no revelar sus intenciones. El punto es que pudo dar media vuelta y pom y juraría que mientras ella se alejaba su chico se acercaba de vuelta a su módulo, con la hojita impresa.

 

No lo comprobó, pero juraría que el galán, en su trayectoria de vuelta a la viejita su inconsciente, olería algún rastro del champú Herbal Essences, porque realmente si algo hizo Laura al irse fue caminar apurada y dar saltitos a su pelo con cada paso.

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